L’AVE i Mataró (publicat a CAP GROS)



No es un secret per ningú que, l’arrivada de l’AVE he generat- i,genera- molte polèmica a nivell de Catalunya i, que afecta-i condiciona- les relacions entre les administracions: Estat, Generalitat, Ajuntaments. També al que s’anomena societat civil organitzada. Es bo que sigui així, tan de bo aquesta implicació hagués estat més intensa i extensa.
Sorprèn, però, la poca participació, en aquet debat públic, dels ajuntament. Dona l’impressió que, l’arribada de lAVE a Barcelona es quelcom que, només afecta aquet municipi. Ara mateix, l’impacta mediatic de la possible afectació de la Sagrada Família, amb sembla totalment desproporcionat i, amaga l’importància estratègica d’aquesta infraestructura per el conjunt de l’economia catalana i, per tant, pel conjunt dels ciutadans d’aquets país. Es per axó que, a parer meu, els ajuntaments haurien de participa en el debat polític i ciutadà exigint, públicament, el compliment de l’actual projecte.
Defensar l’actual traçat, com el projecte més realista, sobretot d’ençà del darrer anunci del Ministerio de Fomento al respecte de les obres, es essencial per tal de superar el retard històric que, ha patit l’arribada de l’AVE a Barcelona per anar, després, fins a la frontera francesa.
L’intensitat del debat ha anat en augment amb declaracions i contradeclaracions, gairebé diàries. L’importancia de d’infraestructura i, la seva repercussió en el creixement econòmic es cabdal per Catalunya-tambe, per Mataró- un retard més seria fatal; crec, que axó, es fora de tota discussió.
Es per axó que, caldria una implicació pública del nostre Ajuntament i, de les organitzacions locals al respecta, atés el costos de tota mena que representaria un nou retard en l’execució de les obres; cosa que, no ens podem permetre de cap manera, ni per el model ferroviari que representa, ni per la política de mobilitat sostenible que volem que es desenvolupi.

Europa, en la encrucijada




El largo proceso de construcción de la unidad europea se encuentra en un momento, especialmente delicado (hasta aquí, nada nuevo). La construcción europea (siempre) ha sido difícil y compleja; ha precisado de complejísimas negociaciones que, nunca han sido fáciles ni rápidas. Al contrario: difícil y, sobre todo, lento. A nadie puede extrañar que la negociación de intereses tan diversos y, en algunos (muchos) casos contrapuestos, genere tanta discusión y demande tanta habilidad negociadora, ese “toma y daca” constante; pero, es así, ya que hay que armonizar para avanzar en temas difíciles y de fuerte contenido económico.
Los problemas de la negociación nunca habían sucedido en un escenario como el actual: 27 países miembros y algunos con escasa vocación europeísta (por no decir, nula) y, en algunos casos, más pendientes de defender los intereses de EE.UU. que los de la construcción europea.
El Consejo de Roma del 20 de octubre de 2004, aprobó por unanimidad el tratado constitucional (15 socios, hoy, 12 nuevas incorporaciones). En 2007 18 socios lo han ratificado, 9 dicen que lo ratificarán y 3 abiertamente en contra (Reino Unido, Polonia, Republica Checa), en al posición de estos tres ya pudimos observar su posición, abiertamente atlantista, cuando la guerra de Irak.
Ahora, el consejo de de junio, en Roma, se llegado hasta donde se podía. ¿Qué se configura? A mi parecer: la Europa de varias velocidades. No ya, la de dos velocidades (por ej.: EURO), si no la de varias; pero, además le de mayorías reforzadas, en función de los temas de interés.
Se trata que el Tratado de Reforma (así se llamará, ahora), permita llegar con un texto aprobado por todos, a las próximas elecciones europeas de 2009. De ninguna manera podemos permitirnos que no se suscriba la Carta de los derechos fundamentales y, que no funcione el mercado interior de servicios de interés general, autentica razón de ser de la Unión Europea.
Esta UE, construida a base de muchos esfuerzos y sacrificios. Fundamentada sobre la base de valores de: justicia, solidaridad, y derechos sociales. Auténtico modelo social europeo que, constituye una esperanza para muchos pueblos del mundo

La lealtad necesaria




Leído esta mañana en un titular de periódico:”Zapatero ha encarcelado a 19 terroristas más que Áznar”. Para mi es una muestra del nivel de encuadramiento militante en el que hemos llegado en la lucha antiterrorista. Partidos políticos, instituciones, medios de comunicación, una gran parte de la sociedad civil, nadie escapa, a ese grado de encuadramiento, casi parece un concurso; lo grave, lo angustioso, es que estamos hablando de uno de los problemas más antiguos de la democracia española, hablamos de muerte, sufrimiento, dolor, mucho dolor, a lo largo de muchos años.
En uno de mis últimos escritos dije que yo no creía en la sinceridad de P. Popular, en lo referente a la unidad antiterrorista. Desgraciadamente, los hechos, me están dando la razón; poco le duró al PP la declaración de buenas intenciones en este tema, una muestra muy significativa la hemos tenido en el reciente debate sobre el estado de la nación, todo apunta que esta es la política que mantendrán hasta las próximas elecciones generales. Parafraseando a Napoleón podríamos decir que: “no hay que distraer al enemigo cuando se equivoca”. Pero, por desgracia, en este tema no se puede permitir que nadie se equivoque, hay vidas en juego, hay victimas, es demasiado serio para no insistir en la necesaria unidad de los demócratas.
Hay que exigirle al PP y los medios afines lealtad, la misma de la que gozaron ellos cuando gobernaban. Hoy se ha podrido comprobar, que todas las mentiras que dijeron durante el periodo de tregua eran, eso, mentiras. Hoy mismo podemos leer en la prensa que desde la tregua llevamos más de 14 detenciones de etarras, algunas muy importantes que, según parece, han logrado lustrar dos atentados con bomba.
Este es el camino, pero no olvidemos, que la negociación llegará, tiene que llegar, si queremos, de verdad, acabar de una vez, con el terrorismo. Y ese será el momento en que la lealtad será más necesaria, imprescindible, diría yo.

Golpe de timón



Esta semana la mayoría de medios de comunicación y, los analistas políticos coinciden en dos cosas: Primero, que el Presidente Zapatero ganó, ampliamente, el debate sobre el estado de la nación. Segundo, que la remodelación del gobierno ha sido un audaz golpe de timón.
Efectivamente, cualquier observador de la vida política española, ha podido constatar, el giro espectacular que se ha producido, en relación a la valoración política, del Presidente zapatero y de su capacidad de iniciativa después de la ruptura por parte de ETA de la tregua. La mayoría –de manera exagerada- daba por finalizada la legislatura y, prácticamente situaban a Rajoy en La Moncloa. En política suele ser mal método de análisis, confundir ilusión por realidad; y eso, es lo que le ha pasado a más de uno. En primer lugar, no había que confundir el fracaso de los contactos para conseguir la paz en el País Vasco, cuya responsabilidad recae enteramente sobre los terroristas y, que lógicamente produjo una cierta desorientación y desanimo, con el fracaso de la “política de paz”. En segundo lugar, deducir de ahí que el gobierno había agotado su agenda política y su capacidad de iniciativa.
Llevamos demasiado tiempo en nuestro país, dejando que el P. Popular y sus medios afines coloquen a ETA en el centro de nuestra vida política; tanto, que a veces parece que solo exista el terrorismo como preocupación del pueblo español. Esta vez la exageración –hasta el paroxismo- le ha jugado una mala pasada al PP y a su líder. Tanto, que esta vez les costará recuperarse ya que se han quedado sin discurso. Uno cosa es reunir a unos cuantos de miles en la Castellana –por muchos que sean y, lo son-otra muy distinta es que esto de para ganar las elecciones; despreciar las preocupaciones-todas- de los ciudadanos da malos resultados. Rajoy en ese debate no ha hecho ni una sola propuesta y, eso, se paga. Puede que la pelota estuviera en el punto de penalti, como dijo Áznar, pero el gol se lo han marcado en propia puerta
Creo que hay que saludar positivamente los cambios en la composición del gobierno. En ellos hay mucho contenido político y voluntad e iniciativa para agotar la legislatura resolviendo algunos temas de envergadura. Especialmente significativa me parece en el caso de Cataluña, la elección de Carme Chacón. Preparación, juventud, vocación de servicio público contrastada: una gran apuesta de futuro.
Lo dicho: golpe de timón. Encaramos la recta final de la legislatura y, hoy nadie duda que la iniciativa la lleva el gobierno.

Municipi i Democràcia (Publicat a Capgros)



La celebració dels trenta anys de democràcia a Espanta, coincideix amb la constitució dels nous ajuntaments. Aquesta coincidència, en principi, sembla molt positiva; però no es així, la forta abstenció registrada en els recents comicis municipals, fa que la joia que sentim per els trenta anys de democràcia, tingui un cert, regust amarg.
Es cert, els demòcrates, avui ens sentim contens; pel que fa el llarc període democràtic que vivim( el més llarc de l’historia d’Espanya), però, també, perquè coincideixen el moment de més desenvolupament econòmic y social que ha viscut, mai el nostre país. Benestar i riquesa, que han permès que amplies capes de la població accediren a nivells de benestar, impensables , tan sols fa uns anys.
Si es així, perquè no ens felicitem?. Dons, perquè la participació a les recens eleccions (i no tan sols les últimes), en fa tenir un grau de pessimisme considerable. Alguna cosa no estem fen be (especialment a Catalunya), quan la ciutadania manifesta un tan alt grau de descontent.
La vida democràtica no es fàcil, ni aquí, ni arreu, però quelcom paca quan el rebuigs es tan alt (a Catalunya, el diferencial es de !0 punts). Cal que els partits i reflexionin i cal introduir millores en la relació entre política i ciutadania, axó no es fàcil, o sé, però cal avançar en noves formes i noves propostes, per tal d’evitar que la distancia cada día que pasi s’eixampli.
Pel que fa a les eleccions municipals, cal felicitar-se, per la normalitat y, en general per el resultat, la ciutadania ha parlat i ha dit –crec- moltes coses; però sobre tot, una : cal una nova forma de fer política, al nostre país

¿Será verdad?



Hoy ha tenido lugar la entrevista entre Presidente del Gobierno y el líder de la oposición. Del comunicado posterior se puede deducir, una cierta esperanza, en la línea de intentar superar la enorme distancia que separa a los representantes de las dos principales fuerzas políticas de nuestro país, en lo que hace referencia a los grandes temas de estado y, muy especialmente, en materia de política contraterrorista.
Para mi, sinceramente, albergo serias dudas de que eso sea posible; la trayectoria de los últimos tres años del Partido Popular, me hacen dudar, creo que razonablemente, de la verdadera voluntad de apoyar al gobierno en esa materia. Son demasiadas las descalificaciones de trazado grueso, los insultos-se ha tratado de traidor al Presidente- de difícil encaje, las mentiras interesadas; en suma, la falta total de colaboración, en materia tan sensible para la vida política de nuestro país, para la convivencia democrática.
Voy hacer un esfuerzo-voluntarioso- y, me concedo, a mi mismo, un plazo para la esperanza. Reconozco- públicamente- más fruto de la esperanza, que del convencimiento. Soy de los que no quiero ver otro atentado de ETA, y al lado oír al Partido Popular decir que es culpa del gobierno, vergüenza semejante no se la merece este país
Aplaudo a Rodríguez Zapatero, que haga todos los esfuerzos necesarios para conseguir la unidad contraterrorista; de la misma manera, aplaudiré-sinceramente- los esfuerzos del líder de la oposición que vayan encaminados a tan noble fin

Una larga historia



En estos días creo que me he leído todos los artículos que se han escrito sobre la ruptura de la tregua de ETA. En realidad nada nuevo bajo el sol. Comparto, lógicamente, la indignación y la enorme decepción por todo lo que representa esa ruptura pero, más allá, difícilmente encuentras una cierta esperanza de que hay algún camino por donde avanzar. Yo al menos, me encuentro en una gran contradicción, comparto la opinión de que hay que extremar las medidas represivas, las actitudes de firmeza (que, de otro lado, no han cesado) el no dar tregua policial, ni judicial a la banda terrorista y a su entorno. Pero, de otro lado, soy de los convencidos que no hay otra salida que la negociada. Como todos sabemos, este es un conflicto de muchos años, que han tenido que afrontar todos los gobiernos de la democracia y, que estos han ensayado muchas formulas pero, ETA sigue ahí. No nos engañemos, esto es posible porque tiene arraigo social, hay sustrato político detrás, una parte importante de la sociedad vasca le da su apoyo (con todos los matices que se quiera). Ante esto la solución policial no es suficiente: Tiene que haber acción política.
Hoy esto no es posible, el comunicado de ETA, muestra que hoy no se dan las condiciones políticas para que esto sea posible. Ante esto al gobierno solo le cabe la acción policial de máxima dureza.
Lo que me parece realmente intolerable e insólito es la actitud del Partido Popular: La banda terrorista rompe la tregua y el P.P pide responsabilidades al gobierno. Alguien puede imaginar algo similar en cualquier país democrático. Una vez más el principal partido de la oposición a perdido una ocasión de oro para dar la talla de partido de gobierno.