IRAK, cuatro años después




El presidente de EE.UU, G. Busch, nos ha obsequiado con una declaración, cuando se cumplen cuatro años de la inmoral e ilegal guerra preventiva contra Irak. En ella proclama solemnemente que: que no abandonara Irak y que, puede ganar la guerra. Como se puede ser tan cretino o estar tan ciego; esta guerra la tienen perdida desde antes de la invasión. Cuesta creer que un país que se supone cuenta con los mejores expertos y, grandes recursos dedicados ala información, pueda cometer un error de tales proporciones; es más fácil de entender el seguidismo del Sr. Blair y la tontería ególatra del Sr. Aznar. Esta guerra no terminará como la Vietnam, porque las condiciones, los tiempos y las fuerzas en presencia son otras; pero, no hace falta ser muy experto ni muy listo para ver que las fuerzas invasoras están en un callejón que solo tiene una salida: marcharse cuanto antes mejor. De lo contrario la situación se les complicará más y más. De ahí que nuestro gobierno hizo muy bien saliendo de un conflicto, en el que nunca tendríamos que haber estado, por inmoral y contrario al derecho internacional.
Esta invasión colonial hecha con el único objetivo de reforzar el dominio de EE.UU en la región, hoy está fuera de control. Se puede constatar el fracaso total del trío de las Azores ( Busch, Blair, Aznar). Detrás dejan muchos miles de muertos, millones de refugiados y desplazados, muchos mutilados, familias y pueblos destrozados, y aún siguen persistiendo en el error. La historia, sin duda los juzgará; pero deberían ser juzgados por crímenes contra la humanidad. No hay otra forma de reparar-minimamente- tanta maldad.