Francia, un ejemplo



Una vez más Francia está dando un ejemplo de maneras democráticas. Primero fue la alta participación registrada, con motivo de la primera vuelta de las elecciones presidenciales y, ahora con el debate por televisión de los candidatos. Realmente interesante desde cualquier ámbito que se mire, tanto en el fondo como en la forma, una perfecta combinación de la mejor tradición democrática. Hay!, cuan lejos está nuestro país de esta práctica; seria bueno que todos: políticos, medios de comunicación y ciudadanos nos fijáramos un poco con nuestros vecinos, aprendiéramos y pusiéramos en práctica estas enseñanzas, nuestra convivencia seguro que mejoraría, no tendríamos una vida política tan crispada, pero sobre todo, seguro, que ayudaría ha resolver mejor los problemas de la gente.
Quién siguió el debate seguro que se enriqueció política y humanamente, de esto estoy seguro. El seguimiento por más de veinte millones de personas, demuestra que la política interesa, cuando se entra a debatir aquello que realmente interesa a la gente. Pudimos ver argumentos y propuestas basados en datos, poca especulación inútil, modelos de sociedad claros y por tanto propuestas alternativas que permiten escoger entre modelos distintos pero con un fondo común: República, ciudadanía, democracia.